Sucede que para muchas personas los términos auténtico y original son iguales, pero poseen significados diferentes. Cuando un objeto es original, no quiere decir que sea auténtico y de la misma manera funciona a la inversa. La palabra auténtico proviene del latín authenticus, mientras que la de original resulta de originālis, cuyo significado está relacionado al origen, al nacimiento.
El término auténtico se utiliza para hablar de aquel objeto que es confiable, pero no falsificado. Es decir, es algo creado sin doble sentimientos, algo genuino, pero este no quiere decir que se trate de algo original. Si bien no es falsificado, si podría tratarse de una copia de otro objeto ya existente.