Los seres humanos comenzaron a organizarse geográficamente con el paso del tiempo. El crecimiento de la civilización y la incorporación de avances tecnológicos hicieron que se llegaran a distinguir dos espacios de asentamiento principales. Estos son el espacio rural y el urbano. Distinguirlos resulta sencillo gracias a sus características.
La principal diferencia entre estos espacios radica en el nivel de construcción o civilización que existe en cada uno de ellos. Así mismo las personas que residen en cada espacio ocupan, generalmente, actividades muy diferentes que no podrían realizarse en el espacio contrario.