Cuando buscamos instruirnos sobre ciertos temas es importante conocer la diferencia entre el conocimiento y la creencia para no confundirnos. De esta manera cabe señalar que el conocimiento se trata de aquella información que conocemos o aprendimos de alguna manera. En cambio, la creencia es algo en lo que confiamos y pensamos que es cierto sin ningún tipo de cuestionamiento.
El conocimiento
Como mencionamos en la introducción, el conocimiento describe toda aquella información que hemos descubierto o aprendido estudiando o por experiencia. Estos conocimientos adquiridos atraviesan un proceso de aprendizaje hasta integrarse en nuestro saber. También cabe señalar que no se trata de información fija, la cuestionamos constantemente y la actualizamos a medida vamos aprendiendo nuevas cosas.
Los conocimientos forman una parte fundamental de nuestra vida, ya sean teóricos o prácticos. El conjunto de estos conocimientos que adquirimos a lo largo de nuestra vida conforman nuestro saber. Y es gracias a los conocimientos que tenemos que podemos tomar decisiones, interactuar con nuestro entorno y las personas que nos rodean.
Las creencias
En el caso de las creencias, estas no necesariamente constituyen saberes aprendidos y comprobados. Representan ideas o cuestiones que hemos incorporado en algún momento y tomamos como verdaderas. Por lo general las creencias no suponen cuestionamientos acerca de su veracidad y se mantienen igual a lo largo del tiempo.
Aunque por lo general las creencias cuentan con un carácter estático e inmutable, lo cierto es que también podemos cambiar de opinión sobre ellas. Las creencias suelen originarse en una fuente externa que incorporamos sin cuestionar ni dudar. Al igual que sucede con el conocimiento, las creencias influyen en nuestros pensamientos, opiniones y comportamientos.
Resumiendo podríamos decir que las diferencias entre conocimiento y creencia se basan en el origen de cada una. El conocimiento es información que adquirimos por medio del aprendizaje o bien en la práctica y se actualiza cada vez que aprendemos algo nuevo. Las creencias son ideas o conceptos que incorporamos y consideramos ciertos sin dudar.
Otras diferencias entre conocimiento y creencia
Teniendo en cuenta el proceso de aprendizaje continuo al que se encuentran sometidos los conocimientos vamos desarrollando una serie de criterios en base a ellos. Así nuestra experiencia nos permite intuir y comprender qué nuevas técnicas y conocimientos nos sirven para mejorar. Incluso podemos poner esos conocimientos en práctica haciendo realidad nuevas concepciones basadas en ellos.
El carácter estático de las creencias las vuelve intocables en la mayoría de los casos. Resulta extraño, pero no imposible, que cambiemos o modifiquemos nuestras creencias. La función de las creencias reside en guiar nuestro accionar, las decisiones que tomamos y quienes somos.
A pesar de las cualidades de estos conceptos es importante no limitarlos ni limitarnos a nosotros mismos. Siempre podemos poner a prueba nuestras creencias y conocimientos y lograr superar las expectativas o metas propuestas. Ya sea que buscamos aprender algo o cumplir un objetivo, las creencias y conocimientos no deberían limitarnos sino ayudarnos a conseguir lo que nos proponemos.