El yoga y el tai chi son dos prácticas que realiza el ser humano motivado por diferentes intereses. Aunque ambas prácticas comparten similitudes y principalmente se asocian por su estilo relajado y calmo, son muy diferentes entre sí. Tanto el modo en que se realizan como su origen e incluso la vestimenta de cada una, las distinguen claramente.
El yoga es una práctica que consiste en la combinación de ejercicios de relajación, estiramiento y respiración. Su fin es lograr calma y bienestar tanto a nivel físico como mental. La puede realizar casi cualquier persona ya que se basa en una serie de posturas o movimientos lentos, pero que implican cierto control del cuerpo y capacidad de concentración.
El tai chi, a diferencia del yoga, es un arte marcial que se practica para el ataque y la defensa personal, así como para la meditación y mejora de la salud corporal. Es muy común que se realice en lugares públicos como parques y suele implicar el uso de una vestimenta particular de color blanco.
Una de las diferencias a destacar entre estas prácticas radica en su lugar de origen. Mientras que el yoga nace en la India, el tai chi es originario de China. Sin embargo en la actualidad, ambas actividades se realizan en cualquier lugar del mundo.
El yoga se practica tanto de pie como sentado o acostado, mientras que el tai chi se realiza de pie solamente. A simple vista el tai chi parece una especie de danza donde se van moviendo los pies para desplazarse y con los brazos se realizan movimiento en el aire de manera relajada y natural.
Al igual que el yoga, el tai chi también se practica para la relajación y concentración, así como para mejorar la fuerza y flexibilidad.
En el caso del tai chi el peso se concentra siempre en los pies y éstos son los encargados de llevar al cuerpo en sus movimientos. El yoga utiliza diferentes partes del cuerpo como los brazos, las piernas, las manos y la espalda.
Yoga y tai chi tienen distintas finalidades
Tanto el yoga como el tai chi se practican con la finalidad de ejercitar el cuerpo y la mente. La relajación, la respiración, el estiramiento y la conexión con uno mismo son algunas de los fines que persiguen las personas que realizan estas prácticas.
Más allá de los fines similares, el tai chi se caracteriza por ser una técnica de ataque y defensa. Cada movimiento que se realiza es pensado en un intento de proteger al cuerpo y defenderlo de posibles ataques. Aun así no se trata de una práctica específica de combate sino que está pensada para preparar al cuerpo mental y físicamente, desarrollando la capacidad de concentración.
El yoga apunta casi exclusivamente a la relajación individual y a encontrar la paz interior, y no a defenderse o atacar a otro. Se puede realizar en grupo, pero también es muy común que se practique de forma solitaria o aislada.