Cuando hablamos del agua podemos identificar diferentes tipos y estados de este recurso natural tan importante. Una de estas clasificaciones del agua se refiere a la dureza de la misma donde encontramos agua dura y agua blanda. La diferencia entre estas clases de agua radica en la cantidad de sales de calcio y magnesio disueltas que tiene el agua.
Esta clasificación del agua parte desde una perspectiva hidroquímica del agua. La misma atiende la concentración de compuestos minerales que se encuentran en cierta cantidad de agua. En un primer momento la diferencia entre el agua dura y el agua blanda es que la primera contiene más cal que la segunda.
Agua dura
Tal como mencionamos antes, el agua dura se caracteriza por contener una cantidad mayor de cal en su composición química. La cantidad de estos minerales que presenta el agua dura dependen del lugar geográfico del que proviene la misma. También es un factor determinante en la cantidad de minerales que contiene la propia naturaleza geológica del suelo.
Este tipo de agua no es muy recomendable para uso doméstico ya que puede causar ciertos problemas. Debido a los minerales que contiene el agua dura, resulta frecuente que afecte el funcionamiento de electrodomésticos que utilizan grandes cantidades de agua. Además, el agua dura tiene un sabor diferente a la blanda y la cal que contiene suele oxidar y obstruir las cañerías.
Agua blanda
Claramente el agua blanda se diferencia de la dura en la menor cantidad de cal y minerales que contiene. Sin embargo, es importante mencionar que se puede clasificar al agua en distintas categorías de acuerdo a la cantidad de minerales que contiene. De esta manera, las aguas blandas son las que contienen menos de 150 mg de carbonato cálcico.
Luego le siguen las aguas semi blandas que contienen entre 150 y 200 mg de carbonato cálcico. Seguidas por las duras que tienen entre 200 y 400 mg de carbonato cálcico, las muy duras con una proporción entre 400 y 550 mg y las extremadamente duras que contienen más de 550 mg de carbonato cálcico.
Otras diferencias entre aguas duras y blandas
Antes mencionamos que la concentración de minerales en el agua dependen del lugar donde proviene esa agua. Por esa razón, podemos encontrar agua dura con frecuencia en aquellos lugares costeros. Estas zonas suelen abastecerse con aguas más mineralizadas que tienden a contener cantidades mayores de sedimentos.
En zonas montañosas, en cambio, el agua de la que se abastecen suele contener menos minerales porque el agua corre arrastrando menos componentes. Por esta razón, el agua blanda es más pura y apta para el uso doméstico que el agua dura. La alta concentración de minerales en el agua dura le cambia el sabor que puede llegar a resultar desagradable.
El origen del agua dura suele ser subterráneo donde se encuentran suelos calcáreos, por eso tiende a dejar grandes cantidades de residuos en las tuberías. En el caso del agua blanda, surge de pozos y aguas superficiales, los minerales se encuentran disueltos en forma de sales en cantidades mínimas, pero tampoco es apta para consumir.