Aunque a simple vista el aire y el viento parecieran la misma cosa y hasta nos referimos a ellos indistintamente no lo son. En primer lugar, cabe mencionar que el aire se trata de una combinación de gases que conforman la atmósfera terrestre. Mientras que el viento se podría describir como el movimiento de este aire dentro de la atmósfera terrestre.
De esta manera podemos decir que el aire se encuentra constantemente a nuestro alrededor, es lo que respiramos. Son gases invisibles presentes en la atmósfera de nuestro planeta que hacen posible la vida en la tierra. En cambio, el viento es el aire en movimiento generado por la presión atmosférica y los cambios de temperatura.
El aire
Tal como hemos mencionado, el aire se trata de una combinación de gases que conforman la atmósfera de nuestro planeta. La gravedad es la encargada de mantener al aire rodeando la Tierra volviéndolo habitable. El aire se encuentra compuesto por elementos tales como el oxígeno, el dióxido de carbono y el nitrógeno.
La palabra aire deriva del término aer-eris del latín y ἀήρ del griego cuyo significado se refiere al movimiento hacia arriba. El aire se caracteriza generalmente por ser incoloro, inodoro e insípido, por lo que no lo percibimos con nuestros sentidos. Sin embargo, cuando existe contaminación en el ambiente puede llegar a tomar características más perceptibles.
El viento
En el caso del viento, y como ya hemos señalado, se trata del movimiento que tiene una masa de aire dentro de la atmósfera. Podría decirse que este movimiento se genera como una especie de compensación entre las diferentes presiones atmosféricas. La palabra viento deriva del término ventus del latín y desde sus orígenes ha hecho referencia al movimiento del aire.
Teniendo en cuenta que el viento se trata esencialmente de aire, comparte la mayoría de sus principales características y aspectos físicos. Aunque vale aclarar que el viento se forma cuando el aire se mueve de una zona de alta presión a una de baja presión. Esta acción busca lograr un equilibrio entre las distintas zonas que cuentan con características opuestas.
Otras diferencias
Algunas de las principales características físicas del aire es que ocupa lugar en el espacio y tiende a expandirse y contraerse. Esto depende en gran medida de la temperatura existente ya que cuando esta es mayor el aire asciende y aumenta su volumen. Pero si la temperatura es menor tiende a descender, lo mismo sucede con su volumen. Esto se debe a que el aire no cuenta con un volumen exacto sino que tiende a ocupar el espacio disponible.
En el caso del viento, que se encuentra formado por el aire, tiene características físicas similares. Pero al tratarse de una corriente se le suman características tales como una dirección, fuerza y velocidad. De esta manera podemos enumerar distintos tipos de vientos tales como una brisa, una ráfaga, un huracán, un tornado, entre otros.
Aunque también existen otras clasificaciones del viento considerando otras cualidades. Así podemos distinguir vientos alisios, anabáticos, catabáticos o geostróficos. El primero describe vientos con dirección y velocidad constante, el segundo se trata de un viento cálido y húmedo. El viento catabático es también conocido como viento de montaña y el geostrófico se caracteriza por el equilibrio entre dos cualidades diferentes.