En el ambiente gastronómico existen alimentos similares que vienen en diferentes variedades o formatos. En algunos casos resultan ser de la misma familia de producto o se trata de una variedad o derivado de otro producto. Un ejemplo de esto se encuentra en los tipos de chocolate, muchas personas desconocen la diferencia entre el chocolate negro y el blanco.
El formato original del chocolate presenta un tono oscuro que va desde el marrón oscuro tirando al negro. El chocolate normal se fabrica con la parte grasa del cacao, la manteca de cacao, con el polvo del cacao y con azúcar. Este chocolate tiene un sabor más reconocible y presenta una consistencia seca y crujiente, a diferencia del chocolate blanco.
En cuanto al chocolate blanco, se fabrica de la misma manera que el otro tipo pero lleva sólidos de leche en lugar de cacao. Este tipo de chocolate es más dulce y lleva más grasa que el chocolate normal, a pesar de ello tiene un sabor más suave que el otro. Otra diferencia se encuentra en su textura, el chocolate blanco es más blando y se derrite con mayor facilidad.
El chocolate oscuro es más popular que el blanco y se comercializa mucho más, además de que se consigue en cualquier tienda. La popularidad del chocolate oscuro radica también en la gran variedad de usos que puede dársele. Esto quiere decir que no solo puede disfrutarse como una golosina sino que puede emplearse en la elaboración de diferentes bebidas, salsas, postres, etc.
Así como el chocolate oscuro puede emplearse para elaborar diferentes platillos, bebidas y decoraciones, el blanco también se utiliza con el mismo propósito. Sin embargo, es más común que se use el chocolate común por ser más sabroso. También como señalamos antes, el chocolate blanco no se fabrica ni comercializa tanto como el otro.
En resumen podemos decir que la diferencia entre estos chocolates radica en los siguientes aspectos: Los ingredientes con los que se fabrican, el sabor que tienen, la textura y consistencia que presentan. El chocolate común es más sólido, sabroso, crujiente que el blanco, pero éste contiene más azúcar, grasa y se derrite con mayor facilidad.
Otras diferencias entre chocolate blanco y normal
Existe una creencia generalizada sobre que el chocolate blanco es más liviano que el oscuro. Pero si analizamos los ingredientes de estos chocolates descubriremos que no es así. Esto se debe a que el chocolate blanco contiene más azúcar y grasas que el chocolate común.
A pesar de esas creencias, se ha comprobado que el cacao aporta diferentes beneficios para la salud. En este sentido, como el chocolate oscuro contiene mayor cantidad de cacao que el blanco se considera que es más saludable. Además recordemos que el chocolate oscuro suele ser más puro que el otro que lleva más azúcar, grasas y leche.
Para saber qué tan puro es el chocolate debemos tener en cuenta su color y los ingredientes que contiene. El chocolate amargo es más puro porque contiene mayor porcentaje de cacao y no lleva demasiados ingredientes extra. Un chocolate marrón claro seguramente lleva más azúcar y leche que el llamado chocolate amargo.