En el reino animal existen algunos ejemplares que solemos confundir, sobre todo aquellos que pertenecen a la misma familia. Por esta razón resulta muy frecuente que confundamos o ignoremos la diferencia entre varios felinos grandes. Un ejemplo de esto sucede con el leopardo y el guepardo que además cuentan con una apariencia muy similar.
Además de ciertas semejanzas en sus nombres y el hecho de compartir el aspecto moteado de sus pieles, existen algunas diferencias entre estos animales. En primer lugar tienen distintos hábitat naturales, diferente tamaño y hasta el aspecto y forma de sus manchas es diferente.
Leopardo
El leopardo, cuyo nombre científico es Panthera pardus, es un felino de pelaje amarillo con manchas negras rectangulares. Los felinos de la familia Panthera como el leopardo, el león o el tigre, cuentan con unas estructuras anatómicas que les sirve para rugir. También vinculado a su especie, el leopardo es un felino más corpulento y musculoso que el guepardo.
Siguiendo estas características anatómicas, los leopardos al ser grandes felinos tienen una cabeza grande y redonda. Al ser felinos corpulentos llegan a pesar alrededor de 90 kg y son considerados de los felinos más fuertes. Los leopardos son animales adaptables y habitan el continente africano y la parte sudeste de Asia.
Guepardo
El guepardo es considerado el animal más veloz del mundo y se caracteriza por unas líneas negras que le enmarcan la cara. Su nombre científico es Acinonyx jubatus y es la única especie que queda de esta familia de felinos. Los guepardos presentan una apariencia de pelaje amarillo moteado, al igual que el leopardo, pero sus manchas son redondas y pequeñas.
Físicamente, el guepardo es un felino grande y alargado, pudiendo medir hasta dos metros de largo. Es un animal más bien esbelto y ligero y su cuerpo se encuentra adaptado para ser veloz llegando a pesar 60 kg como mucho. Los guepardos son oriundos de la sabana africana, aunque en Irán habita una subespecie de guepardos.
Otras diferencias entre leopardo y guepardo
Ya mencionamos que el leopardo es uno de los felinos más fuertes del mundo mientras que el guepardo es el más veloz. Se cree que los guepardos pueden alcanzar una velocidad superior a 95 km en una distancia de medio kilómetro. Su impresionante velocidad se debe a lo desarrolladas que se encuentran sus características físicas para ello.
Tanto la anatomía y velocidad características del guepardo, sumado a una vista ejemplar lo vuelven especialmente idóneo como cazador. Como es típico en los felinos, los guepardos vigilan y acechan a sus presas con paciencia a una distancia estratégica. Acostumbra a cazar de día cuando otros depredadores se encuentran durmiendo.
Los leopardos tienen a su favor la fuerza y corpulencia, se cree que pueden ser más fuertes que el león. Acostumbran a descansar en las ramas de los árboles, son excelentes luchadores y saltadores. Tienen garras afiladas con las que se ayudan para atrapar a las presas, cosa que no tienen los guepardos.