Dentro del comportamiento humano podemos encontrar ciertas actitudes o técnicas que buscan influencias a otros. Algunas de estas actitudes o técnicas pueden llegar a confundirse y tomarse por la misma cosa cuando no lo son. Es lo que ocurre, por ejemplo, con la seducción y la manipulación, que difieren en sus métodos y objetivos.
Desde el vamos es importante señalar que aunque ambas se consideren como conductas influenciales son diferentes. La forma en que podemos influir en otras personas puede darse de forma consciente o inconsciente. Esto depende de los fines que perseguimos al interactuar con otros y también es importante considerar la personalidad de quien influye.
La seducción
En primer lugar es importante señalar en qué consiste la seducción y cómo se efectúa. Como comportamiento influyente, la seducción se asemeja bastante a la persuasión y suele emplear ofertas tentadoras para convencer al otro. Incluso puede ocurrir que durante la seducción se utilicen mentiras y se prometan cosas que nunca se cumplirán.
La seducción también puede incluir, en ciertos casos, aspectos sexuales como forma de tentar al otro. Cuando se da en una relación de pareja resulta bastante frecuente que se emplee este tipo de seducción. Entre los principales objetivos de la seducción se encuentra la intención de influir los deseos y las emociones de alguien.
Manipulación
En el caso de la manipulación, cabe señalar que es una forma consciente de influenciar a otra persona. La manipulación es una técnica que aprendemos de temprana edad y se basa en aprovechar o generar ciertas situaciones para influenciar a otro. Aunque por regla general la manipulación es una práctica reprochable, lo practicamos más seguido de lo que sabemos.
Las personas manipuladoras son expertas en conseguir que los otros hagan lo que ellos desean. Claramente, la persona que utiliza la manipulación lo hace de forma solapada, nunca expone las intenciones por las cuales manipula a otro. Cuando decimos que la manipulación se aprende a temprana edad lo decimos porque desde la niñez aprendemos formas de conseguir lo que queremos haciendo tal o cual cosa.
Otras diferencias entre seducción y manipulación
La seducción, a diferencia de la manipulación, puede darse de manera inconsciente como un aspecto de la personalidad de alguien. Algunas personas resultan seductoras sin intentarlo o incluso sin poder controlarlo. También puede ocurrir que algunas personas recurren a la seducción involuntariamente por no saber cómo actuar en ciertas situaciones.
Si bien estos comportamientos son diferentes guardan algunas semejanzas sobre todo a la hora de influenciar a alguien. También cabe señalar que la seducción es más aceptada socialmente que la manipulación. La seducción suele ofrecer algo a cambio, ambas partes salen ganando en cierta forma, la manipulación suele beneficiar más al manipulador que al manipulado.
La manipulación puede ser efectiva en ciertos casos, sobre todo si a quien se dirige no lo nota. Pero también puede ocasionar graves consecuencias cuando se descubre porque es una forma de engañar a alguien para que haga lo que queremos. Como comportamiento influyente, la manipulación es considerada la forma menos ética de comunicar.