Algunos términos suenan semejantes o suelen emplearse de manera indistinta en ciertas situaciones. Un ejemplo de ello es lo que sucede con las palabras acusado y sospechoso en investigaciones policiales. Aquellos que desconocen lo que implican estos conceptos es muy probable que no sepan en qué se diferencian y los confundan entre sí.
En primera instancia cabe mencionar que se califica de sospechoso a aquella persona a la que se investiga por un delito. Esto no quiere decir que sea el culpable, solo que los investigadores sospechan de él y deben interrogarlo duramente. Un acusado es aquella persona que fue hallada culpable de un delito y debe afrontar el correspondiente proceso legal.
Definición de sospechoso
Como anticipamos antes, el sospechoso es toda aquella persona a la que se investiga como posible culpable de un delito. Los encargados de una investigación criminal o policial deben barajar algunos sospechosos de cometer dicho crimen. En este sentido las sospechas se centran en personas vinculadas al hecho o a la víctima del crimen investigado.
Las personas calificadas de sospechosos pueden ser interrogadas o vigiladas de cerca por los investigadores. En el primer caso buscan descubrir su culpabilidad o pueden presionarlos para que declaren. Sin embargo, no pueden acusar a nadie hasta no comprobar su culpabilidad en el crimen o delito que se investiga. O como dice la famosa frase, todos son inocentes hasta que se demuestre lo contrario.
Definición de acusado
Se califica de acusado a aquella persona sobre la cual se abre un caso policial o judicial. Es un paso posterior a ser considerado sospechoso pero anterior a ser condenado por el crimen investigado. Alguien acusado en un crimen será condenado si es hallado culpable o se declara culpable del crimen en cuestión.
En terminología judicial podemos decir que el acusado es el sospechoso de un crimen que se lleva a juicio. Podemos decir entonces que estos conceptos representan diferentes instancias en una investigación criminal sobre quien comete el crimen. El acusado en un crimen enfrenta cargos que serán llevados a juicio para delimitar su papel en dicho acto.
Otras diferencias entre sospechoso y acusado
Cuando se comete un delito, aquellas personas que estuvieron involucradas o vinculadas al mismo son consideradas sospechosas. Esto se debe a que los encargados de investigar ese delito creen firmemente que esas personas pudieron cometerlo o participar en el mismo. En esta primera instancia de la investigación solo se lo contempla como el posible causante del crimen.
Las causas criminales cuentan con diferentes etapas que deben respetarse en nombre de la ley. Cuando la investigación policial concluye y encuentra al culpable del crimen se lo detiene para que la investigación continúe por vía judicial. Durante el juicio el sospechoso se convierte en acusado por el delito cometido y debe afrontar los cargos en su contra.
En esta instancia de la investigación criminal se presentan la parte acusadora y la defensora. Cada una de estas partes debe presentar en el juicio los argumentos y pruebas que sirvan de apoyo al caso. Una vez se terminan de mostrar las pruebas y declaran todos los testigos, el juez o jurado deben definir si el acusado es culpable o no del crimen cometido.