Diseño y decoración interior son profesiones que requieren de distintas habilidades. El diseño es el arte y la ciencia de entender el comportamiento de las personas para crear espacios prácticos en una edificación. Los retos de este oficio son muchos, al tener que enfrentar la óptima integridad de un edificio, casa, oficina o local comercial.
Ambas profesiones implican renovaciones y cambios en la estructura interna de un lugar; es por eso que muchos de sus profesionales, tienen conocimientos de arquitectura; deben estar preparados en psicología ambiental y saber cómo crear espacios para que la gente viva de manera práctica y armoniosa.
Si se diseña, por ejemplo, una vivienda para personas mayores o discapacitadas, se debe hacer con accesos prácticos y rampas, no con escaleras, para que no se convierta en una incomodidad para sus habitantes vivir allí.
El diseño, aparte de ser funcional, debe ser armónico; teniendo en cuenta la iluminación, la acústica, temperatura y muchos otros aspectos. Los espacios comerciales y de vivienda, tienen especificaciones diferentes y quienes los van a habitar: esencias, necesidades, gustos, culturas y presupuestos muy distintos; así que cada proyecto es en sí, un reto.
La decoración interior adorna el espacio, lo amuebla, lo enriquece, le da toques finales a lo que el diseñador de interiores ha creado. No es tampoco una tarea fácil ya que casi siempre deben tener en cuenta el gusto personal del cliente y ceñirse a un presupuesto.
Materiales como papel tapiz, alfombras, lámparas, cortinas, muebles, cuadros y demás, tienen que mezclarse armoniosamente en un espacio y brindar funcionalidad a quienes van a habitar el espacio. En otras palabras, el diseño interior, engloba más conocimientos que el de decoración interior, pero ambos se complementan perfectamente.
La coordinación entre la mano de obra, los materiales, obtener suministros de buena calidad a precios razonables y la constante supervisión del proyecto hasta entregarlo en forma óptima al cliente, son más de las funciones del diseñador de interiores.
El diseño interior apunta a buscar el manejo óptimo de espacio interior, materiales, estructuras, iluminación, acústica. Elabora planos y gráficos de construcción. Su trabajo debe ceñirse a los estatutos y códigos de la región donde se esté haciendo el proyecto.
Diseño interior y decoración interior tienen distinta finalidad
El diseño de interior colabora con diferentes profesionales que participan en cada programa y hacen seguimiento post ocupación para asegurarse de la satisfacción del cliente.
Mientras que la decoración de interior modifica el aspecto de un espacio interior o exterior, embelleciendo o cambiando su ambientación. Sus armas de trabajo son los colores y las texturas, complementos, muebles y acabados. Este oficio desarrolla una ambientación agradable y funcional.
Ambos buscan el bienestar de quienes ocuparán el espacio. Los dos se complementan mutuamente. A los diseñadores se les exige más preparación. En algunos países se les exige un registro o licenciatura, además de certificado que demuestre su experiencia.
Los decoradores no requieren educación formal, ni licencia para trabajar. Los diseñadores, crean el espacio que han de embellecerlos decoradores, ellos mediante el proceso de diseño espacial, maximizan el uso del espacio.