Las palabras que el ser humano utiliza para comunicarse son tan diversas y numerosos que resulta necesario organizarlas. Por ello existen diferentes categorías gramaticales o grupos de palabras. De esta manera se clasifican en sustantivos, adjetivos, pronombres, adverbios y verbos, entre otras. Cada un tiene cierta función asignada y características que las diferencia de las demás.
El sustantivo es la categoría de palabra bajo la cual se agrupan aquellos seres u objetos que se toman como independientes. Muchas veces se utiliza como sinónimo de sustantivo la palabra nombre. Esto se debe a que el sustantivo es el nombre con el que se designa a una persona, objeto o animal, por ejemplo.
El sustantivo, a diferencia del adjetivo, posee número y genero. Por ello se puede diferenciar la cantidad de elementos que nombra el sustantivo y si es una palabra en femenino o masculino. Así mismo el sutantivo es una palabra sujeta a variaciones, puesto que admite morfemas flexivos.
El adjetivo, en cambio, es una palabra que se utiliza para describir algo. El adjetivo hace referencia a una cualidad o propiedad de un ser, objeto o situación, entre otros. Generalmente el adjetivo va acompañado de un sustantivo puesto que lo caracteriza.
Un adjetivo puede ubicarse antes o después de un sustantivo y su función es la de modificar a ese sustantivo. El adjetivo aporta un detalle sobre el sustantivo, mencionando una cualidad o característica de este. Por ejemplo “pelota azul”.
Del mismo modo un sustantivo puede unirse a un adjetivo mediante un verbo. El verbo indicará una acción estableciendo una relación directa entre el sustantivo y el adjetivo. Por ejemplo “la casa es grande”.
Existen diferentes tipos de sustantivos. Algunos de ellos son: los comunes que clasifican a elementos de un mismo tipo, los propios que sirven para identificar algo o alguien, los abstractos que nombran algo que no se puede visualizar y los concretos que designan algo material o visible.
Los adjetivos puede ser positivos, comparativos o superlativos. Los positivos son aquellos que mencionan una cualidad, los comparativos establecen una comparación entre dos elementos y los superlativos establecen una superioridad de un elemento respecto a otro.
En el habla cotidiano un ser humano utiliza continuamente sustantivos y adjetivos. Mediante ellos y otros términos puede construir oraciones que le permiten crear párrafo y textos más extensos. Estos son utilizados para comunicarse tanto de manera oral como de manera escrita.
El adjetivo describe al sustantivo
El sustantivo cuando aparece solo, sin un adjetivo, sirve solo para nombrar algo. El sustantivo por lo tanto indica el nombre de un objeto, una entidad, una persona, un animal. Por ejemplo: María, cuaderno, casa, edificio, entre otros.
El adjetivo tiene la función de describir a un sustantivo. Nombra una o más cualidades de este. Por ejemplo: grande, alto, redondo, largo, pequeño, entre otros.
Mientras que el sustantivo por sí solo no habla de las características que tiene un objeto, el adjetivo si lo hace.
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